Un absurdo de la UNESCO
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El Consejo Ejecutivo de la UNESCO (brazo cultural de la ONU) aprobó una absurda resolución que niega todo vínculo histórico entre el judaísmo y el Monte del Templo, en la ciudad vieja de Jerusalén, considerándolo un lugar de culto exclusivamente musulmán.Lo anterior a pesar de que su existencia se remonta 3 mil años atrás, cuando el rey Salomón construyó en ese lugar el Gran Templo, mas de mil 500 años antes del nacimiento del Islam. Decir que el judaísmo no tiene ningún vínculo histórico con el Monte del Templo es como decir que los chinos no tienen ninguna conexión con la Gran Muralla o los egipcios con las Pirámides. Así lo expresó el primer ministro de Israel.

México fue uno de los países que inicialmente respaldó esta resolución, y luego de que la comunidad judía mexicana y el gobierno de Israel condenaran el hecho, el gobierno de México decidió cambiar el sentido de su voto a uno de abstención. Emitió un comunicado diciendo que con el cambio del voto "reitera el reconocimiento que el gobierno mexicano otorga al vínculo innegable del pueblo judío con el patrimonio cultural ubicado en Jerusalén Oriental" (por cierto, el voto emitido por México no puede ser modificado y el recuento final seguirá siendo el mismo). Adicionalmente -según yo para salvar la cara-, la Cancillería destituyó al embajador mexicano en la UNESCO, el Dr. Andrés Roemer, argumentando entre otras cosas que "no informó diligentemente y con acuciosidad del contexto en el que ocurrió el proceso de votación". Cabe mencionar que el Dr. Roemer, para evitar votar en contra de sus convicciones, en un acto de congruencia, abandonó el salón de votaciones en el momento en que México emitiría el voto que a la postre cambió. Esta resolución es un verdadero absurdo. Nadie en su sano juicio puede negar la existencia de vínculos históricos milenarios del judaísmo con el Monte del Templo, y ningún decreto los hará desaparecer. Recordemos que se trata de los vestigios del Templo de Jerusalén, y que actualmente, el lugar mas sagrado del judaísmo es el llamado Muro de los Lamentos, y que es una pequeña porción de 60 metros de uno de los cuatro muros de contención (el muro occidental) erigidos para la explanada sobre la cual fueron edificados el Primer y el Segundo Templo, formando lo que hoy se conoce como la Explanada del Templo por la tradición judeocristiana, o Explanada de las Mezquitas por la tradición musulmana. En Jerusalén se encuentran lugares considerados sagrados para judíos, cristianos y musulmanes, y esta absurda resolución pretende dar a los últimos una especie de "derechos exclusivos de culto" sobre algunos de estos sitios (no puedo creer que alguien alegue tal cosa). Yo no soy religioso, y para mí no existen lugares o cosas sagradas -en el sentido de tener carácter divino o alguna relación con fuerzas sobrenaturales que las convierte en objetos de culto-, pero si millones de personas consideran sagrado un lugar o un objeto, el intento de quitar o limitar de alguna manera sentimientos espirituales colectivos sólo encuentra explicación en el fanatismo religioso. Me parece ridículo que los creyentes de una determinada religión impidan que los creyentes de otra oren en el mismo lugar, sobre las mismas piedras, como si los ruegos de unos impidieran a Dios escuchar los ruegos de otros (no me lo distraigan, dice un viejo chiste alusivo). La propia directora general de la UNESCO afirmó que "el patrimonio de Jerusalén es indivisible y cada una de sus comunidades (judía, cristiana y musulmana) tiene derecho al reconocimiento explícito de su historia y del vínculo con la ciudad", y por su parte, el Secretario General de la ONU declaró que "cualquier intento percibido para repudiar la innegable veneración común de estos lugares no ayuda a la paz y sólo alimentará la violencia y el radicalismo". México se ha definido siempre como una nación multicultural y multiétnica, respetuosa de la historia y las tradiciones de todos los pueblos. Sirva este episodio para ratificar esta posición y permearla a todos aquellos que piensan que sus creencias religiosas son superiores y se deben imponer a las de los demás. "La UNESCO fue creada para preservar la historia, no para reescribirla" Carmel Shama-Hacohen